Llegados a este punto es evidente que un futuro las marcas tratarán de alcanzar a la audiencia del videojuego y los videojuegos se apoyarán en el poder y los recursos de la marca tratando de establecer una colaboración beneficiosa para ambas partes.
Pongo como ejemplo es caso de la tarjeta Visa de ‘Street Fighter IV‘ que venía con descuentos en la tienda online de Capcom.


O en el caso de ‘inFamous 2’ en el que se anuncia una maquina de afeitar
El caso de la saga Metal Gear Solid 2
Hideo Kojima es uno de los creativos que más veces ha incluido el product placement de forma orgánica en sus juegos. En Metal Gear Solid: Peace Walker, la entrega de la saga aparecida originalmente para PSP, no se anduvo con miramientos. Ya hemos visto el ejemplo de que en una aventura encontrábamos guiños a Doritos así como a AXE, Pepsi etc..



Hay muchos títulos de la saga Metal Gear que siguen esta línea publicitaria, con algo más de acierto.
Aparece la revista FHM que además puede ser parte de la acción del juego y ser usado como elemento de distracción para evitar a los enemigos mientras se entretiene con sus páginas.

Las barritas energéticas Calorie Mate en MGS3

o el iPod en MGS4 son otros ejemplos más certeros.

Incluso en el Metal Gear Solid de PSX encontrábamos una consola en el despacho de Otacon,
